• Filtros

    Filtrar por

    Disponibilidad
    Precio
    Borrar todo

CBD para el sueño profundo, ¿cómo funciona?

Ciclos de sueño

El sueño es un proceso fisiológico fundamental para el buen funcionamiento de nuestro organismo. Nuestra vida se rige por el ritmo circadiano sueño-vigilia, que permite a nuestro organismo funcionar de forma óptima, con un tiempo "activo" en el que el cuerpo está despierto y un tiempo "de descanso" en el que el cuerpo está (¡normalmente!) dormido.

El sueño se divide en diferentes ciclos durante los cuales el cuerpo se encontrará en distintas fases de sueño, más o menos profundo y reparador:

La fase de sueño REM: corresponde a los momentos de sueño con una actividad cerebral próxima a la de la fase de vigilia.

Fase 1: La fase de transición entre la vigilia y el sueño, que corresponde a los momentos en los que no se está ni dormido ni despierto.

Fase 2: sueño ligero de ondas lentas, la segunda fase del ciclo del sueño

Fase 3: Sueño lento y profundo, que corresponde a la primera fase del ciclo del sueño.

Estas diferentes fases del sueño varían a lo largo de la noche, principalmente entre la medianoche y las 7 de la mañana, y proporcionan al cuerpo el descanso que necesita.

Estos frágiles ciclos de sueño pueden verse alterados por diversos factores externos o internos, que pueden interrumpirlos, acortarlos o simplemente desplazarlos. El sueño y sus ciclos también cambian con los años, sobre todo en el estadio 2 (sueño de ondas lentas), que es más profundo hasta los 20 años y más ligero a medida que envejecemos, de ahí la correlación entre envejecimiento y trastornos del sueño.

Trastornos que afectan al sueño profundo

Entre el 16 y el 20% de la población padece insomnio, el 5% de los adultos sufre apnea del sueño y el 8% padece el síndrome de las piernas inquietas: estas son las cifras de los tres trastornos del sueño más comunes en el mundo, que afectan a casi el 30% de la población mundial. El insomnio, el más común, sigue siendo muy poco conocido y mal tratado, y nos gustaría contarle un poco más sobre él.

Insomnio, la enfermedad del siglo XXI

El insomnio es un trastorno neurobiológico y psicológico que corresponde a un déficit de sueño, ya sea a la hora de conciliar el sueño o de mantener un sueño profundo. Muy incomprendido, el insomnio es una patología que se estudia de cerca, ya que afecta a una gran proporción de la población (16%) y tiene un gran impacto en la vida social de los afectados.

Los tratamientos farmacológicos actuales (benzodiacepinas) no parecen ser los más eficaces cuando se comparan con tratamientos alternativos como terapias o medicinas alternativas (plantas). Aquí es donde el CBD para el sueño está creciendo en popularidad, en forma de aceite, cápsulas o té de hierbas.

Transitorio o puntual, el insomnio suele estar ligado a factores externos que lo desencadenan durante un periodo definido (de unos días a varios meses), en el que a menudo intervienen factores similares como :

  • Estrés
  • Depresión
  • Problema alimentario
  • Dolor
  • Consumo de estimulantes (café, té, etc.)

Si el insomnio se produce más de tres veces por semana durante tres meses o más, se convierte en crónico y debe tomarse en serio (apoyo médico o terapéutico). Hay tres factores relacionados con el insomnio crónico:

  • Factor predisponente: Predisposición genética (antecedentes de sueño ligero) o psicosocial (traumatismo infantil).
  • Factor precipitante : Un factor externo que desencadena el insomnio (el más frecuente), como el estrés, un acontecimiento vital, una situación profesional, el exceso de trabajo, etc.
  • Factor de mantenimiento: Factor que mantendrá el insomnio y permitirá que forme parte de la vida cotidiana, como los hábitos de comportamiento (pasar mucho tiempo en la cama durante el día, ver películas tumbado en la cama, etc.).

Dormir bien para gozar de buena salud

El sueño es excelente para el organismo, ya que reduce el riesgo de ciertas patologías y mejora la salud en general.

He aquí 8 beneficios del sueño para la salud:

  • Mejora el estado de ánimo
  • Mejor salud cardiaca
  • Regula los niveles de azúcar en sangre
  • Mejora la función mental
  • Restaura el sistema inmunitario
  • Reduce el estrés
  • Mejor energía
  • Reduce el riesgo de obesidad

Dormir mal aumenta el riesgo de enfermedades

La falta de sueño puede desencadenar la aparición de ciertas patologías y provocar trastornos fisiológicos que alteren el funcionamiento del organismo.

Por ejemplo, el riesgo de resfriarse se multiplica por un 4% cuando falta sueño, y en los adolescentes, la falta de sueño está correlacionada con bajos niveles de materia gris (vinculada a la actividad cerebral).

Las noches de menos de 6 horas aumentan las probabilidades de desarrollar diabetes de tipo 2 en casi un 28%. La alteración del ritmo circadiano y de la síntesis de ciertas hormonas (cortisol, hormona del crecimiento) implicadas en el metabolismo de la glucosa conduce a la intolerancia a la glucosa y al desarrollo de diabetes de tipo 2.

El riesgo de aumento de peso está correlacionado con noches cortas y menos ejercicio durante las horas de vigilia (debido a la fatiga y la somnolencia diurna). Varios estudios han establecido una correlación entre la actual crisis mundial de obesidad (con un aumento de la proporción de obesos del 10% al 25%) y la reducción del tiempo de sueño, que se ha reducido en más de 2h30 en los últimos años.

El sueño es un vector de la inmunidad: ciertas células inmunitarias (leucocitos, linfocitos) funcionan según un ritmo circadiano, y cuando se ven privadas de sueño, su producción se ve alterada. Y un mecanismo inverso también demuestra que el sueño es importante: cuando estamos sometidos a infecciones víricas, nuestro organismo alarga automáticamente nuestro ciclo de sueño (necesitamos una noche más larga para recuperarnos), lo que demuestra que la duración del sueño tiene un impacto directo en la buena salud.

La interacción del CBD y el CBN con el sistema endocannabinoide

Los cannabinoides como el CBD y el CBN interactúan a través del sistema endocannabinoide presente en nuestro sistema nervioso central y tienen una acción agonista o antagonista sobre diferentes receptores y enzimas del organismo. Estas diferentes interacciones ayudan a regular la homeostasis del organismo (control del peso, estrés, ansiedad, sueño, dolor, etc.) y acompañan a una amplia gama de patologías.

CBN: Los beneficios del cannabinoide del sueño

El CBN es un cannabinoide menos conocido que el CBD, pero igual de beneficioso para la salud. Tiene una afinidad muy alta por el receptor CB1 del sistema endocannabinoide, lo que le confiere un efecto sedante, antiinflamatorio y calmante muy importante.

Es gracias a esta acción que el CBN ha ganado popularidad por sus beneficios en el tratamiento de los trastornos del sueño (insomnio, despertares nocturnos, apnea del sueño...). Su fuerte efecto sedante pone al organismo en un estado ideal para conciliar el sueño y favorece el sueño profundo.

Un estudio científico realizado en 20 personas demostró incluso que el cannabinol mejoraba los ciclos de sueño y el tiempo de sueño profundo.

El CBN tiene un efecto beneficioso sobre el sueño, pero estos beneficios son mayores cuando el CBN está rodeado de otros cannabinoides como el CBD, lo que se conoce como efecto séquito. El efecto séquito corresponde a la sinergia de los cannabinoides cuando están presentes juntos dentro de una extracción (aceite), se potenciarán mutuamente y ofrecerán mayores beneficios.

CBD: Regula la homeostasis en el cuerpo humano

El CBD, un cannabinoide que se encuentra en la planta del cannabis, se ha convertido en los últimos años en un ingrediente clave de los productos naturales. Su capacidad para regular la homeostasis del cuerpo humano, influyendo en diversos procesos fisiológicos como el sueño, la ansiedad y el estrés, le ha valido la reputación de "medicina alternativa". Aunque no está autorizado como medicamento en Francia, su consumo sigue siendo legal.

Su interacción con el sistema endocannabinoide le permite actuar sobre los niveles de serotonina a través de los receptores 5-HT1A. La serotonina desempeña un papel fundamental en el mantenimiento del ritmo circadiano sueño-vigilia a través de su vínculo con la producción de melatonina. Por lo tanto, el CBD ayuda a inducir el sueño y el sueño profundo regulando los niveles de serotonina.

Además, también interviene en el estrés y la ansiedad, dos factores que se encuentran muy a menudo en los diagnósticos de insomnio o trastornos del sueño. Aliviando el cuerpo gracias a sus diversas interacciones, el CBD es el cannabinoide perfecto para los problemas de sueño.

PREGUNTAS FRECUENTES

¿Es el CBD perjudicial para la salud?

No, el CBD no es perjudicial para la salud y no hay forma de "sobredosis" de CBD, porque si tomas más de 160 mg al día, tu cuerpo ya no asimila el cannabidiol y el excedente simplemente se "destruye".

Los únicos efectos secundarios que pueden experimentarse son náuseas o problemas digestivos en caso de sobredosis, y éstos son muy poco frecuentes dependiendo del organismo (más o menos receptivo).

¿Puedo tomar CBD al mismo tiempo que somníferos?

El CBD puede interactuar con ciertos medicamentos, pero puede ser tolerado por el organismo cuando se toma junto con somníferos. Sin embargo, debido a la inhibición enzimática que tiene el CBD, se debe vigilar la toma de somníferos y CBD al mismo tiempo y siempre se debe consultar al médico antes de empezar a tomar CBD si ya se están tomando somníferos.

Si tu médico está de acuerdo, te recomendamos que empieces a tomar CBD en dosis bajas, mientras reduces gradualmente la ingesta de somníferos. El objetivo es no combinar ambos en dosis elevadas.

¿Qué interacciones farmacológicas puede tener el CBD?

El cannabidiol puede interactuar con varias moléculas que se encuentran en los medicamentos.


No existe ningún riesgo ni peligro para la salud, sin embargo, la interacción entre medicamentos puede reducir o anular el efecto del medicamento y/o del CBD. Hemos creado una guía para el consumo de aceite de CBD con una sección de "Interacción entre medicamentos " (parte 7) en la que se enumeran las distintas moléculas con las que no se debe tomar CBD. Infórmate antes de consumir aceite de CBD.

¿Qué dosis debo utilizar de aceite de CBD para dormir?

La dosis recomendada es de 4 gotas cada noche justo antes de acostarse:

  • 40mg CBD
  • 40 mg de CBN
  • 2mg Melatonina



Esta es la dosis máxima (2mg de melatonina por día como máximo según ANSES). Puede dividirla por 2 si desea comenzar con (2 gotas).

Esta dosis se ha establecido de conformidad con la legislación europea sobre productos alimenticios.

Modo de empleo, 30 minutos antes de acostarse (después de comer):

  • Agite la botella de aceite
  • Poner 4 gotas de aceite para dormir bajo la lengua
  • Dejar actuar de 30seg a 1min sin tragar (para que la mucosa oral pueda absorber el aceite).

  • Tragando lo que queda después de este tiempo

Concilie el sueño rápidamente y disfrute de un sueño profundo.

¿Cuál es la dosis correcta de las cápsulas de CBD para dormir?

La dosis diaria recomendada de CBD es de 50mg y la dosis máxima diaria de melatonina según las recomendacionesde la ANSES es de 2mg.

Por ello, proponemos una dosificación adaptada y gradual en función de las necesidades:

Comience con una cápsula por noche (25 mg de CBD, 25 mg de CBN y 1 mg de melatonina) durante una semana o diez días. Si después de este periodo no notas ninguna mejora en la calidad de tu sueño, puedes pasar a dos cápsulas por noche (es decir, 50mg de CBD, 50mg de CBN y 2mg de melatonina).

La dosis máxima es de dos cápsulas por noche.

¿Cómo deben utilizarse las cápsulas de CBD?



Le recomendamos que tome nuestras cápsulas por la noche, después de comer y, más concretamente, 30 minutos antes de acostarse. Coloque la cápsula en la boca y beba un vaso de agua para tragarla suavemente. Podrá sentir sus beneficios entre 30 minutos y 1 hora después de tomarla.

No esperes más...

Dormir tranquilo